De la autora superventas de La asistenta, llega un nuevo y adictivo thriller lleno de giros imprevistos y ecos de Rebeca. Victoria Barnett lo tiene todo. Una brillante carrera como enfermera. Un marido guapo y cariñoso. Un bonito hogar en las afueras y el sueño de llenarlo de niños.

La vida no es fácil en un college de Nueva Inglaterra si eres un chico modesto y falto de afecto que llega de California, y Richard Papen lo sabe; por eso agradece que lo admitan en un pequeño grupo de cinco estudiantes capitaneados por un profesor de literatura clásica con mucho carisma y pocos escrúpulos.

Al comenzar su trabajo como enfermera en una prisión de máxima seguridad, Brooke Sullivan enseguida aprende que hay tres normas cruciales: 1. Trata a los prisioneros con respeto. 2. Nunca reveles información personal. 3. Nunca jamás intimes con los reclusos.

¿Por qué nos cuesta tanto poner límites? El miedo a perder el trabajo, la idea del amor romántico o el temor a ser excluidos de nuestro círculo social son algunas de las razones. Por ello nos cuesta tanto hacerlo y, cuando nos decidimos, sentimos culpa e incluso ansiedad. Lo cierto es que poner límites en las relaciones es tan necesario como ponerlos en una carretera: evita accidentes. Lo importante es saber cómo comunicar esos límites porque eso es lo que nos ayudará a mejorar nuestra relación con los demás y con nosotros mismos.

Violet Sorrengail creía que a sus veinte años se uniría al Cuadrante de los Escribas para vivir una vida tranquila, estudiando sus amados libros y las historias antiguas que tanto le fascinan. Sin embargo, por órdenes de su madre, la temida comandante general, Violet debe unirse a los miles de candidatos que luchan por formar parte de la élite de Navarre: los jinetes de dragones.